Rodrigo Agudo |
PRENSA UNIDAD VENEZUELA. Convocar a un Acuerdo Nacional para la Reconstrucción del
Aparato Productivo Agrícola del país, que involucre al Gobierno, al sector
privado y a los expertos del ámbito académico, en momentos en que los
inventarios se hallan en estado de precariedad, propone Rodrigo Agudo,
coordinador de la Comisión Técnica Agroalimentaria de la Mesa de la Unidad
Democrática (MUD), al abordar las Perspectivas Económicas, Políticas y Sociales
de Venezuela, período 2014-2019.
En
compañía del Secretario Ejecutivo de la MUD, Jesús “Chúo” Torrealba, Agudo
presentó la ponencia “Situación del Abastecimiento Alimentario en la Venezuela
del 2015. ¿Un Problema Coyuntural o Estructural?”, urgiendo a una declaratoria
de Emergencia Nacional en dicha área, tras lo que calificó como un modelo de
políticas públicas “agotado”, derivando en la actual situación de escasez que sufre
el pueblo venezolano, la cual se agravó, principalmente, durante el último año.
"Lo
que viene es hambre, caballero. Se acabaron los inventarios de los mayoristas,
minoristas y de todos los proveedores. No tenemos inventarios de ningún tipo,
por lo tanto es imposible garantizar que esos productos estén en los anaqueles.
Por lo tanto, lo único que debe hacer el Gobierno es generar confianza y
dialogar para reactivar la producción. La única forma de acabar con la escasez
es generando confianza", puntualizó el secretario ejecutivo de la MUD.
Por
su parte Agudo, quien es ingeniero químico, explicó que el Estado es el mayor
responsable del desabastecimiento de alimentos básicos que atraviesa la nación,
incurriendo en una política de destrucción del aparato productivo.
"Nos
sentimos en la obligación de hacerle un llamado de atención al Gobierno
Nacional; este problema es un problema de confianza de parte del sector
productivo al Gobierno. Es un problema que el Gobierno solo no puede garantizar
el pleno abastecimiento. Es responsable de la escasez agroalimentaria. Es
imposible garantizar la presencia de los productos en los anaqueles si el mismo
día que se producen, el Gobierno los obliga a vender. Citó, como ejemplo, el
caso de Empresas Polar, “que son inspeccionadas a diario por el Gobierno, así como la mayoría de las
empresas privada”, aseguró Agudo, especialista en planificación y gerencia, en
el sector alimentario.
Capacidad instalada ociosa
En
la misma línea, Agudo enfatizó que el Estado Venezolano se presenta como
propietario de en lácteos, 50 % de la capacidad instalada de pulverización y
pasteurización de leche cruda y único importador de leche en polvo; en café, de
70 % de las torrefactoras; de 55 % de la capacidad instalada del trillado de
arroz; en pesca y acuicultura, de 65 % del procesamiento y envasado de sardinas
y atún; en cárnicos, del 60 % de la capacidad de los mataderos; en maíz, de 45
% de la actividad relativa a harinas precocidas; y en azúcar, dueño del 63 % de
los centrales que procesan el rubro en Venezuela.
Aunado
a esto, el perito de la MUD entiende que la escasez que se arrastra desde el
año pasado proviene también de la conjunción de factores tales como la alta
dependencia de lo que el gobierno llama “el imperialismo” y la pérdida de los
créditos externos y recursos directos a través del endeudamiento, que tornan
sumamente difícil recuperar la producción nacional en las diferentes categorías
de la producción agroalimentaria. Disminuyen, asimismo, los inventarios y la
oferta, generándose la angustia que estalla en el último eslabón de la cadena,
la familia venezolana, al no poder surtir adecuadamente la mesa con los
productos de la dieta básica, registrándose una notable baja del consumo per
cápita.
"Se
acabaron los inventarios de los minoristas y de todos los proveedores. No
tenemos inventarios de ningún tipo, por lo tanto es imposible garantizar que
esos productos estén en los anaqueles. Por lo tanto, lo único que debe hacer el
Gobierno es generar confianza y dialogar para reactivar la producción. La única
forma de acabar con la escasez es generando confianza", puntualizó.
Por
supuesto, que en todo este fenómeno, el ingeniero recuerda que inciden
sobremanera los descensos del precio del
barril de crudo, con una caída de 55% al revisar - en el presente estudio - la
cotización de 2014 y la registrada en enero pasado; y una inflación que se ha
quintuplicado en tres años de recesión
económica.
Lamentablemente,
opina Agudo, el Ejecutivo Nacional “no aprende la lección” y eso se verifica,
por ejemplo, en las recientes
declaraciones del ministro del Poder Popular para Agricultura y Tierras, José
Luis Berroterán, afirmando, en torno al mercado cárnico, que “mientras más
control tengamos, garantizamos más eficacia”; o haga caso omiso de señalamientos
en el tenor del difundido hace por el Fondo Monetario Internacional, alertando:
“El parco crecimiento de Latinoamérica de 2014 se desacelerá en este ejercicio
(2015) al bajar al 0,9 %, para repuntar ligeramente en hasta 2 % afectando
principalmente a Venezuela”.
Para
el experto en materia agroalimentaria, es prácticamente imposible con el modelo
económico vigente, garantizar el pleno abastecimiento, bien sea por vía de la
producción nacional – en el corto o mediano plazo – o de la importación, dada
la mengua en materia de divisas. No se concretan, entonces, con esa falta de
confianza a la cual hace alusión, la inversión, la reinversión y que la ciudadanía abandone la
intranquilidad en la cual se encuentra postrada.
Publicar un comentario